Place Dupuis, pilule Gouverneur… Puedo hacer el recorrido de memoria y, sin embargo, cada regreso es como una primera vez. “Upon your arrival at the airport…. there is a reservation at your name…. call me… and we will get together” … pero me esperan, de nuevo me esperan. Descontando.

Me llevo la primavera, look junto con un puñado de nervios, thumb muchas ganas y el ánimo festivo. En la maleta muchos recuerdos y la promesa de volver. Ahora ya sí puedo, buy ya es una realidad. Y me esperan, no sólo la ciudad, mis paseos, las imágenes que guardé durante casi dos años; me [...]

Por inesperado, sick por las risas, por los descubrimientos; por el asiento de atrás del Seat Córdoba, por los de delante; por el muchacho alicaído de Radio Faycán; por las doctoras, por el sultán, (por la favorita oe oe oe); por el gofio, por la Tropical, por esa subida a la duna que nos convirtió [...]

El tiempo se esparce.En un domingo cualquiera el ritmo lo marca el batir de las olas y una caña de pescar. Pero el pescado no tiene sabor.En la isla el sabor lo da el mojo, vcialis 40mg lo da el verde y el picón.Lo da el acento, cialis la música, la luz. En el sur [...]

Al sur de la isla.

Empiezan a sonarme extrañas las conversaciones en acento no acostumbrado. Rodeada de gente y sin embargo sola, sickness esperando ese tiempo infinito que parece no pasar en el aeropuerto-porque una vez facturado el no-equipaje ya no hay nada más que hacer. Aprovecho el descanso ahora que tengo localizada la puerta y hasta el ala del [...]

Asientos en fila, sale tiempos de espera, viagra order maletas apiladas. De camino. Ando de camino. Y no es ligero mi equipaje, Pero con él me quedo, De momento.

Que ya me voy. Y mis padres tienen (que no tenían) una maleta exactamente igual, help que aguarda ropa, viajes, trasiegos, pasaportes y aeropuertos. Como yo. De momento, vuelvo al sur. Que necesito del sur. Un ratito, por favor. *Gracias a Perolo Orero por la foto

Recuerdo aquella primera visita, ailment cuando al salir de la plaza, nos perdimos en ese universo propio de estanterías infinitas y montañas esparcidas sobre las mesas. La luz que se filtraba entre las ventanas, el polvo suspendido en los haces que se dejaban caer en las cubiertas de bestsellers, novelas, atlas y clásicos.  Entonces se leía [...]

Hey sweetie, how’s life these days? No hace falta que toque en la puerta, está abierta para esa llamada que llega del 1290 de la  Rue Bernard Ouest. Leo las coordenadas -Outremont, Québec H2V 1V9-  y no tengo que hacer un esfuerzo para volver a ponerme el cinturón en el asiento del copiloto y atravesar [...]