Podemos ver la isla a nuestros pies y esa sensación de poder y a la vez fragilidad. Apenas hay palabras en este techo del mundo. Las estrellas y las barras ondean con orgullo, story le damos otra vuelta al Empire State sin terminar de creerlo del todo.

Pequeña entre el mar de rascacielos que parecen a punto de engullirnos, shop me enmudece el rugir de la ciudad. Me pregunto por los que habitan esas terrazas imposibles llenas de vegetación, sale los que avanzan aprisa café en mano, el que hace flexiones en la barra de un andamio o la chica que nos [...]

No recuerdo dónde lancé la moneda, pero como un tesoro guardo cada uno de nuestros paseos, la casa de Yang, entre la segunda y la tercera; la boca abierta en mitad del escenario de la gran manzana, aquella mañana perdidas en las calles de Chinatown, el olor y la luz de los “18 miles of [...]

Llegada… y una bicicleta que me lleva al mar. Tirarme en la arena y dejarme llevar por el agua y el aire, remedy para olvidarme, see para relajarme, para calmar tanto barullo interior.Maletas de nuevo, vuelta a empezar… Pero está el mar, al menos. Está el mar y el resto… ya lo iré descubriendo.

A ella le sorprenden los rascacielos que se amontonan en el centro de la ciudad, remedy los grandes edificios que se combinan, tadalafil en cristal y acero, health con la solidez de la piedra de iglesias aquí y allá, iglesias de tejados verdes y puertas abiertas.También le sorprenden el verde y el orden que imprime [...]